Divorciado dos veces y con excelentes relaciones con mis dos ex esposas. Dos hijos y tres nietos angelicales. Viví 50 años en Madrid en un barrio precioso y apacible hasta que esa ciudad mutó en sucursal del infierno y me vine a Santander de donde son mis orígenes y donde espero acabar.
Aunque me gustan los lugares exóticos y distantes no viajo casi nada por pereza o miedo. Ocho años en la librería del Centro Reina Sofia y otros ocho en una fundación dedicada a las ferias de arte. Simultáneamente he colaborado semanalmente en un diario de difusión nacional dedicando mis textos a dos temas: los veleros deportivos y de lujo y asuntos de espionaje y la literatura que de ellos surge.
No bebo alcohol, lo detesto mas bien por el teatro que surge alrededor de su ingesta, pero fumo tabaco desde los 14 años. Cada vez menos. Pero sigo fumando desgraciadamente. Nado todos los días, invierno y verano, en piscina cubierta desde los 20 años. Es la mejor terapia para hablar con uno mismo.
Tengo mis propias opiniones en política o vida social pero me cuido mucho de con quien las comparto. Mejor callado y escuchando que discutiendo. Creo que soy un buen lector.